Un juez ya ha dado por probado que el Partido Popular se ha estado financiando ilegalmente desde hace 20 años.
Bien.
Apliquemos la Ley de Partidos de Gallardón: suspendamos cautelarmente al PP en sus funciones como partido político antes de la repetición de elecciones generales.
Esta ley, en este caso concreto en el que nos encontramos con el PP, lo permite, lo habilita, da lugar a esta posibilidad.
Y debemos hacerlo porque si no, estaríamos cometiendo fraude electoral contra todas y todos los españoles, incluidos los que votan al PP. ¿Por qué? Pues la razón es bien sencilla, la explico: todo o una gran parte, o una parte del dinero que el PP ha empleado para llevar a cabo sus campañas electorales, es dinero corrupto, negro, es dinero delincuente. Está demostrado.
Entonces, es evidente el que si el PP no hubiera contado con ese dinero corrupto, con ese dinero negro, con ese dinero delincuente, es científicamente evidente que no habría obtenido, no sólo en las últimas elecciones, sino en ninguna, los resultados electorales que ha obtenido.
Bien, según este razonamiento cuya lógica es aplastante lo que hace al razonamiento, es este caso, indiscutible, es de lógica, es de sentido común, es de justicia y honradez, es de salud democrática para todas y todos los españoles, incluídos los que votan al PP, es más, sobre todo para los que votan al PP, que se le impida al PP presentarse a las próximas elecciones generales que van a tener lugar en este país el 26 de Junio de 2016 mediante la suspensión cautelar en sus funciones del Partido Popular.
Y además de todo el párrafo anterior, es que es legal hacer esto y, yo diría que muy necesario. Para la salud de toda la Democracia Española.
Entonces, hay que aplicar la Ley de Partidos de Alberto Ruiz Gallardón, en los artículos que habilitan la suspensión cautelar de un partido político, hay que aplicársela al PP para que no se pueda presentar, en lógica, en razón, en justicia y en sentido común, a las próximas elecciones generales del 26 de Junio.
Es por la Salud Democrática de todas y todos los españoles y españolas y por la Salud Democrática del Estado Español mismo.
Es como cuando tienes un miembro de tu cuerpo cangrenado y con todo la pena y el dolor de tu corazón te lo tienen que amputar puesto que si no lo haces, todo tu cuerpo se cangrenará y morirás.
Pues esto es exactamente lo mismo. Exacto al milímetro.
Es una pena, una lástima, una tragedia para todas y todos los españoles, para el mismo sistema democrático español que el PP esté cangrenado hasta el punto en el que lo está ahora mismo. Es una auténtica tragedia para la Democracia Española.
Una gran tragedia.
Pero si no amputamos este miembro cangrenado, con todo el dolor de nuestro corazón, cangrenará a todo el cuerpo del Estado Español y moriremos como Democracia.
No se le puede dejar presentarse a las elecciones a un partido del que se ha demostrado ya por activa y por pasiva que se ha financiado ilegalmente durante los últimos 20 años. Por honradez, por salud democrática, por dignidad de todas y todos los españoles, en este caso y sobre todo, con todo el respeto del mundo, por la dignidad, sobre todo, de las y los votantes del PP.
Es una tragedia, pero es necesario.
Creo que todas las gentes de este país, tanto de izquierdas, como de centro como las de derechas, como las que no son ni de izquierdas ni de centro ni de derechas, lo sabemos. Lo lamentamos, lo lamentamos profundamente pero lo sabemos. Es triste. Suena mal hasta el decirlo. Pero, por desgracia, todas y todos sabemos que no queda otro remedio: debemos suspender al Partido Popular en sus fuciones como partido político aplicándole la Ley de Partidos de Gallardón, ley vigente en estos momentos, e impedir a Partido Popular presentarse a las próximas elecciones generales con esta suspensión cautelar en funciones.
Es muy triste. Es como cuando castigas a un hijo al que quieres mucho muchísimo pero que se está portando tan rematadamente mal y te está haciendo tan rematadamente poco caso a tus avisos, a tus correcciones, a tus broncas, que ya, en el colmo de la exasperación, no tienes más remedio que, precisamente por lo muchísimo que quieres a tu hijo el predilecto, no tienes más remedio que aplicarle un castigo brutal.
No para destruirle, claro, sino para que aprenda y se corrija para ocasiones futuras.
Así que yo creo que hay que suspender cautelarmente en funciones al Partido Popular, no dejarle presentarse a estas elecciones, porque es que a ver, qué vamos a hacer, joder, es que ya no sabemos qué hacer, pero sí, claro, que se pueda presentar a las siguientes elecciones dentro de cuatro años, de ocho, etc.
La Bilbia dice en su Libro de los Proverbios: “Castiga a tu hijo pero no hasta matarlo”.
El castigo es necesario, pero para que el hijo que se está portando mal se corrija y se porte bien, no para acabar con él, claro está.
La Bilblia dice también, en numerosas ocasiones: “Dios no quiere la muerte del pecador sino su conversión”.
El PP ha pecado gravemente financiándose ilegalmente durante los últimos 20 años.
Debe ser castigado, tal como dice la Biblia y tal como dice Dios, pero no ser destruído, sino para que se corrija, se regenere y vuelva a ser un partido de derechas que entre en el juego democrático español.
El castigo que hay que aplicar al PP, en justicia, con dolor, con pena pero también con cariño y con deseos de que ese partido político se regenere, con las nuevas generaciones de jóvenes del PP que parecen mucho más honrados que sus casi ancianos predecesores, el castigo que hay que aplicarle al PP, en justicia, es no dejar que se presente a las próximas elecciones generales del 26 de Junio, aplicándole, que se puede hacer en estos momentos, La Ley de Partidos vigente.
Es como cuando tu hijo se porta fatal durante una larga temporada y le castigas sin ir al concierto ese de Madonna, o de Bruce Springteen que sólo viene una vez cada cuatro años a España.
Tu hijo o tu hija van a rabiar de lo lindo, a llorar, a insultarte y a encerrarse en su cuarto, pero tú, como su padre o su madre que eres, sabes que te tienes que mantener firme en ese castigo, por muy grande que sea el berrinche de tu hijo, porque si no tu hijo, no va a aprender a ser una persona decente, como Dios manda, y va a ser un desgraciado o desgraciada en la vida, ¿Verdad, papis y mamis?
Así que si se suspende cautelarmente de funcciones al PP para que no pueda presentarse a las próximas eleccciones generales del 26 de Junio, el castigo es adecuado, esto le da cuatro años al PP para regenerarse y recomponerse y, dentro de cuatro años, claro que podrán presentarse a las siguientes elecciones generales y a todas las que quieran, pero una vez hayan hecho limpieza en su casa, que realmente es la de todos, porque el PP, como todos los partidos políticos en este pais, al final, de una manera o de otra, nos influyen a todos, una vez hayan reconstruido el partido y sea un verdadero partido de derechas que represente y defienda los intereses, legítimos, de los españoles y las españolas más próximas a sus ideas
Pero ahora, el PP, no puede hacerlo. No puede.
En realidad es una bondad, una ayuda, una muleta, un apoyo que le damos al PP suspendiéndolo en sus funciones para que no pueda presentarse a estas eleccciones generales del 26 de junio: está enfermo, por decirlo de una manera metafórica, somos los “doctores” y le obligamos a quedarse cuatro años en la cama, recuperándose, porque si no se muere, el “constipado” es demasiado grave.
Si el PP se muere, de alguna manera, nos morimos todas y todos, incluídos las personas y los partidos que tenemos ideas diferentes a ellos, porque si el PP muere como partido, la que pierde, es la Democracia.
Y claro, el enfermo, como casi todos los enfermos, no quiere quedarse tanto tiempo en la cama, le parece una pérdida de tiempo.
Entonces, al enfermo hay que explicarle, como si fuéramos una Mamá cuidando a su hijo: “Mira hijo, estas muy muy enfermito. No te desesperes, Mami te quiere mucho. Ya sé que quieres salir a jugar con tus amigos, pero PePito, cariño, de verdad, mi amor, estás muy muy malito. Confía en Mami, por favor. Quédate cuatro años en camita, recupérate, oxigénate, coge fuerzas, come bien, toma las medicinas, toma tus vitaminas y dentro de cuatro años, cariño mío, no te preocupes, no temas, dentro de cuatro años volverás a jugar con todos tus amiguitos como hasta ahora y meterás todos los goles que quieras porque estarás más fuerte que nunca, mi amor. Hazme caso PePito, cariño, que soy tu Mami, te quiero y todo lo que hago es por tu bien, aunque, como es este el caso, no te guste. Es por tu bien mi amor. Quédaten en camita cuatro añitos y verás como dentro de cuatro años estás pero que muy fenomenal, haz caso a Mami, PePito, haz caso a Mami, por favor…”
Y tu Mami-Doctora te da un besito de buenas noches y te arropa, y luego se queda rezando para que la fiebre se te pase cuanto antes… ¿Verdad? ¿Os acordáis? Cuatro angelitos tiene mi cama, cuatro angelitos que me la guardan…
Es triste. Es muy triste. Pero todas y todos sabemos que esto que cuento, es necesario. Por el bien del PP. Por el Bien de todos. Es necesario, de verdad, con todo el cariño del mundo, pero es necesario.
El PP debe ser suspendido en funciones como partido político en aplicación de los artículos correspondientes de la Ley de Partidos vigente que habilitan para ello, al existir sobrados indicios, sobrados, por desgracia, pero sobrados, que justifican la aplicación de tan dura, triste y desagradable medida. Dura, triste y desagradable, muy desagradable, realmente para todas y todos. Dura, triste y desagradable para la Democracia. Pero, a la vez, medida realmente necesaria, necesaria.
Con pena y tristeza digo estas todas estas cosas y propongo todo esto, porque aunque este partido no sea el mío, y mis ideas políticas sean muy muy diferentes, tengo pena y tristeza Democráticas, en estos momentos, pena y con pena y tristeza, con mucha pena, no tengo más remedio, creo que es lo honrado, lo decente, pienso que es lo correcto, es decir, mi conciencia me obliga a plantear esto que he planteado durante todo este texto.
Y hay que hacerlo cuanto antes. Porque cuando se toma una decisión, sobre todo si la decisión es triste y dura de llevar a cabo, precisamente en ese caso, que es un caso como el que nos ocupa, precisamente la decisión se debe llevar a cabo cuanto antes no sea que más tarde te arrepientas o tengas miedo de llevarla a cabo.
Es por esta sencilla razón que esto que propongo debe ser llevado a cabo de manera posible, lo antes posible, a no más tardar, es decir YA.
Suspender cautelarmente al PP antes de las próximas elecciones. Parar la Cangrena Democrática.
Para que el PP se pueda oxigenar y gane toda la Democracia Española, es decir, para que ganemos todas y todos los españoles, y, en este caso que planteo, creo que, sobre todo, ganarán las y los votantes del PP, al volver a tener dentro de cuatro años, cuando el PP haya curado, un verdadero partido honrado de derechas al que poder votar con orgullo y con la conciencia completamente tranquila.
Todas y todos os necesitamos, PP, para mantener el Buen Juego Democrático en el Estado Español. Todas y todos os necesitamos, PP, pero os necesitamos HONRADOS.
Honrados significa que seréis dignos de nuestra honra. La de los votantes del PP por coincidir con vuestras ideas, PP, y la de los que tenemos ideas diferentes al contar con un enemigo honorable, con un adversario admirable, con un combatiente leal a los suyos y feroz contra sus enemigos.
En estos términos las futuras batallas por ganar la primacía en el sistema democrático español serán épicas, serán formidables, serán admirables, serán deseables y será un gozo legítimo, un auténtico placer, el volver a combatir contra vosotras y vosotros en combate honorable en buena lid en el que, sea cual sea el resultado, el vencido admire y respete al ganador y viceversa.
Queremos y deseamos que os curéis, PP, lo deseamos intensa y profundamente, de verdad. Lo queremos. Dejad que suceda el proceso de vuestra curación y cuando estéis dados de alta, volveremos a combatir en batalla honorable rindiéndonos honores mutuos mediante el desarrollo de épicos combates democráticos en las urnas y en el Parlamento Español.
Recuperáos cuanto antes. Os esperamos en el campo de batalla de la Democracia y de la Honradez. Cuidáos, por favor, no es una ironía, de verdad, no lo es: Cuidáos.
Salud.
Saludos, en este caso, con tristeza democrática.
Saludos.
adoranser